martes, 2 de junio de 2009

Hace un rato


Íbamos a ver "Control" (por cierto, ¿en qué momento el sangriento legado de generaciones postrockeras y protopunkeras se convirtió en un guiño de complicidad entre quienes comparten el gusto por las revistas de moda, la afición a la vanguardia artística y el temor de Dios?), pero terminamos viendo "Imagining Argentina", una película en la que Antonio Banderas sale muy sexy de barba y hace el papel de un director de teatro que es también un virtuoso de la guitarra (claro, como todos los españoles y los argentinos, que vienen siendo más o menos la misma cosa) y sabe usar un rifle de mira telescópica (¿al igual que cualquier intelectual latinoamericano de los años '70...?). Ah, y quizás para poder vender el guión, quizás porque el autor/director ha visto demasiadas miniseries y le encantan esas chorradas, el tipo tiene poderes paranormales y es capaz de percibir los calambres que le dan a Ema Thompson mientras un chico Lacoste todo engominado viola a su hija.

De lo anterior, podemos deducir que:
·Los argentinos hablan inglés, pero con acento;
·Rubén Blades, actor secundario de la película, tiene unas convicciones difíciles de establecer, pues le canta al "Amor y control" como manera de salvaguardar la noble institución de la familia (¡facho!), y luego van y lo tiran al mar de un helicóptero dizque por insurgente antimilitarista;
·Nosotros nos ocupamos de llenar de colorido nuestros dramas personales y colectivos, para mantener bien aceitadita esa máquina de hacer dinero que es Hollywood: Evita Perón, el Che Guevara, los desaparecidos de Argentina, Frida Kahlo, Selena, Héctor Lavoe, el narcotráfico, la guerrilla.... ¿qué vendrá después, El Sudaca Nos Ataca?



¡Plop!

·Domingo